ORIGEN DE LA HUMANIDAD Y LA ASTROLOGÍA.

Y EL FIN DEL CALENDARIO MAYA.

Resulta difícil creer en hipótesis que la cultura oficial de nuestro sistema y colegios consideran fantasiosas o locas. Se nos enseña desde bien pequeños a creer en determinadas cosas y a burlarse de otras aptas para mentes extraviadas o locas.

Es obvio que nuestro sistema social, político y económico, está asentado en favorecer a unas pocas familias del mundo, dueñas del poder (multinacionales, industrias (farmacéuticas, armamentísticas, Fondo Monetario Internacional, …), organismos  y el dinero per se. El resto somos esclavos modernos, condenados a trabajar incansables para apenas llegar a tener unas pocas posesiones que te arrebatan creando crisis económicas cuando consideran adecuado a sus intereses. Esto viene muy bien explicado en algunos videos de David Icke, experto en teorías conspiratorias del sistema.

¿Hasta que punto podemos confiar en la versión oficial del conocimiento, instaurado por aquellos que nos esclavizan, engañan e hipnotizan sistemáticamente a través de la televisión, la radio y los periódicos? ¿O aún crees en la bondad del cine/tv, la política, la economía y las religiones?

Afortunadamente a los poderosos les está resultando un poco más complejo censurar el flujo de información de los millones de documentales que pueden colgarse en Internet.

La mayoría de religiones pretéritas de la humanidad señalan en sus textos o códices (generalmente tallados en piedra), que los dioses, esto es seres provenientes de las estrellas, les enseñaron todo el conocimiento.

En concreto, los manuscritos más antiguos, siempre hablan de seres que provienen de la estrella Sirio, de las Pléyades o de Orión. Estas tres estrellas son nombradas en infinidad de religiones en sus versiones pretéritas, verbigracias: Sumerios, Egipcios, Mayas, Incas, Aztecas, Chinos, Australia, Kayapo (tribu del amazonas brasileña), los Dogón (altiplanicie africana), Los viracochas, … lista de estas pruebas resulta considerablemente extensa, etc. La arqueología y el sistema, simplemente ignoran y ridiculizan estos documentos tachándolos de fantasías irreales. Al sistema que nos esclaviza, no le interesa que el humano comprenda, ni se apasione, ni busque, tan solo espera del humano que duerma en su pequeña y triste vida sin cuestionarse que su existencia podría ser muy distinta y dichosa.

Si los mensajes más antiguos de la humanidad tallados en piedra, de miles de culturas entorno a todo nuestro planeta dejaron escrito que seres provenientes de fuera de este planeta descendieron e interactuaron con nuestros antepasados, ¿por qué iba a ser esto falso? Nuestros ancestros dejaron tallado en miles de templos que los extraterrestres han estado con nosotros, conviviendo y manipulándonos y también enseñándonos. Es una historia larga y compleja. Y poco tiene que ver con la historia oficial. A este respecto, resulta muy ilustrativo las traducciones de las antiquísimas tablas sumerias traducidas por el erudito ZECHARIA SITCHIN. Interesantísimo resulta el largo y muy detallado video de EDMUNDO DANTES, LA HISTORIA PROHIBIDA DE LOS ANUNAKIS. Según estos estudiosos las bibliotecas acadias refieren que un planeta llamado Nibiru, cada 3600 años cruza su órbita con nuestro planeta, permitiendo a sus habitantes (biológica y tecnológicamente mucho más avanzados que nosotros) observarnos, visitarnos, colonizarnos, etc. Que cada lector profundice en esta hipótesis de Sitchin o la rechace si la considera imposible. Entre los trabajos de Zecharia S. encontramos “Las crónicas de la Tierra”, que constituyen una revisión de los orígenes de la historia humana”.

Según las miles de versiones de diferentes culturas antiguas de la humanidad, encontramos en común algunas afirmaciones tales como:

Los extraterrestres (denominados <Anunaki>, <Ángeles>, o <los Dioses Sol> o simplemente <Seres venidos de las Estrellas>) provenientes de Sirio, las Pléyades, Orión o el planeta Nibiru (10º planeta según Zecharia, Marte y Júpiter según Carlos Mesa, planeta X denominado por la Nasa), descendieron a la Tierra y explotaron los recursos naturales de Gaia, especialmente de oro. Descendieron hace cuatrocientos cuarenta mil años. Entonces encontraron toscos mono-erectus (homínidos poco inteligentes y torpes de movimientos, entre otros muchos animales). A través de avanzadísima ciencia genética decidieron hacer evolucionar a estos monos, hasta dotarlos de mayor inteligencia y habilidades. De este modo ganaron la mano de obra de esclavos capaces de explotar minas y extraer oro, que utilizarían para sanar la atmosfera de su propio planeta. Este proceso de perfeccionar a torpes animales hasta seres inteligencias y con conciencia, se desarrolla durante siglos, con toda la complejidad histórica que esto conlleva.

En todo caso, los extraterrestres no solo crearon genéticamente a nuestros antepasados (por lo que no hemos encontrado el supuesto eslabón perdido de la cadena evolutiva: entre Neardental y Homosapiens), sino también nos enseñaron el arte, las matemáticas, la astronomía y astrología (entonces un único saber), la agricultura, la arquitectura y una manera de socializarse más compleja.

Prueba de la presencia de estos enormes extraterrestres, son los más de 500 cráneos que han desenterrado los arqueólogos y que se exhiben en museos de Perú. Se trata de cráneos tres veces mayores a los de cualquier humano, con la parte posterior considerablemente mas prominente, con unas enormes cuencas para los ojos. Con la versión oficial arqueológica, la existencia de estos cráneos no pueden ser razonablemente explicados. Ni tampoco, el cómo pudieron construirse las inmensas y precisas pirámides que conectan nuestro mundo. A este respecto podemos profundizar con las tesis de Nassim Haramein, cuyas charlas se hallan en Internet.

En un momento dado los extraterrestres acaban sintiéndose sexualmente atraídos por las últimas versiones genéticas de digamos “humanos”. * Alusión bíblica en Génesis 6:1-4: <los hijos de Dios (extraterrestres) y las hijas de los hombres, se “liaron”>  Entonces empezaron a procrearse los dioses (extraterrestres) con estas especies creadas en laboratorio. De este modo se desarrolló una nueva especie, más evolucionada, que sería en general las que dejarían a cargo de la especie humana a modo de Faraones en todas las pirámides de la Tierra: las mayas, las egipcias, las chinas, las que hoy están sumergidas bajo el agua, etc. Tanto los extraterrestres (denominados en las antiquísimas tablas sumerias, Anunakis), como la especie híbrida de extraterrestres-homínidos, resultaban ser especies bastante más grandes que los humanos actuales. Por ello, las leyendas e historias sobre gigantes, se hallan en las raíces culturales de todo nuestro planeta. No hace mucho en la India se hallo un esqueleto gigante perfectamente conservado… el gobierno prohibió inmediatamente acceso a la zona, los secretos deben protegerse.

Retornando a los experimentos genéticos que preceden a la humanidad actual: los primeros intentos de mejorar a los monos erectus a través de mezclas genéticas con otros animales, dieron como resultado multitud de seres deformes y con escasas capacidades mentales. Estos seres se han reseñado en múltiples mitologías, por ejemplo en la griega, bajo el nombre de Titanes, seres enormes y deformes, monstruosos, que hubo que destruir.

La astrología es una de esas ramas que el conocimiento oficial actual reniega como fantasioso. Sin embargo, estos sabios extraterrestres que nos enseñaron todo el saber, nos legaron la comprensión de los ciclos de la naturaleza y la conciencia, es decir, la astrología. Los extraterrestres enseñaron al ser humano, que todo fenómeno astronómico codifica en verdad la manifestación de la evolución de la conciencia y por tanto de los acontecimientos. Esto es especialmente obvio en las ilustres culturas sumeria (Mesopotamia), egipcia, maya, china, hindú y griega.

Este hermoso y poderoso conocimiento fue plasmado en millones de templos y pirámides alrededor de todo nuestro planeta. Los extraterrestres enseñaron a la humanidad a construir esas exactas y complejas pirámides, que ayudarían al ser humano a predecir los movimientos astronómicos y por tanto a predecir el devenir de la vida.

Los mayas poseían unos conocimientos astronómicos que aun están ilustrando a nuestros astrónomos actuales sobre ciertos ciclos de la galaxia a la que pertenecemos.

Miles de grabados en piedra, de miles de años de antigüedad muestran prueban pictóricas de interacción con extraterrestres así como una profunda comprensión astronómica de la galaxia y en relación a la Tierra.

Por ejemplo, hay pruebas de que Urano, Neptuno y Plutón se conocían perfectamente hace miles de años, siendo que nuestra moderna cultura los descubrió en los tres últimos siglos. Así se demuestra en algunos gravados en cuevas prehistóricas y en las tablillas sumerias traducidas por Zecharia S.

Probablemente la extensa biblioteca sumeria hallada en unas excavaciones arqueológicas, resulte ser uno de los hallazgos más importantes para comprender la verdadera historia de la humanidad. En muchos aspectos también el trabajo del erudito esoterista y físico cuántico Nasimm Haramein, resulta vital para comprender muchos de los aspectos de la verdadera historia de la humanidad pasada, presente y futura. La ciencia tiene un problema con este científico y es que por una parte ¡¡Nassim ha logrado crear una coherente teoría unitaria de la física!! y sin embargo, al tiempo, defiende múltiples teorías bien documentadas que contradicen muchas de las versiones oficiales del conocimiento humano actual. Así por ejemplo, ofrece muchas y variadas explicaciones relativas a las pirámides que encontramos por todo el mundo. Así como pruebas que vinculan nuestra historia con extraterrestres. Ante tales afirmaciones que el sistema rechaza categóricamente, Nassim resulta ser un erudito sumamente molesto para nuestro sistema de esclavitud moderna.

Estos seres provenientes de fuera de nuestro sistema solar, enseñaron a los mayas, la <sabiduría digna de los dueños del tiempo>, la comprensión de los grandes ciclos, lo que debería denominarse certeramente como la astrología galáctica. Los formaron en lo que conocemos hoy como el “calendario maya”. Un complejo tratado de los movimientos astronómicos y como deducir de ellos los grandes ciclos que va atravesando la humanidad. De ahí la capacidad de los mayas de predecir certeramente, con miles de años de antelación, todo el caos y la destrucción de la actualidad. Recomiendo al interesado los reportajes de la serie: “Las siete profecías mayas”, realizada por Arcobaque Haus y presentado por Fernando Malkun.  A mi entender, son especialmente interesantes la primera y la séptima. La que inicia ofrece una comprensión astrológica de la realidad.  Y la que finaliza, muestra el renacer de la conciencia hacia la que los movimientos astronómicos de los que formamos parte nos abocan. Nos referimos, sin duda al alineamientos que por fin se produce entre la Tierra, el Sol y el Centro de la vía Láctea (Dios o Hunabku en términos mayas). A este fenómeno hace alusión el famoso final del calendario maya, fenómeno astronómico que se produce más intensamente entre el 21 y el 25 de diciembre del 2012. Este fenómeno es parte de lo que en astronomía se denomina la precesión de los equinoccios: para los mayas un tiempo cíclico y galáctico, circular y eterno de 26.000 años. Esto conlleva un total de 12 subciclos (los astrólogos occidentales, afirmamos, la correlación a los 12 arquetipos zodiacales: de piscis a aries), cuya duración se constituye en periodos de 2160 años aproximadamente. Puede profundizar en el tema de las eras y de la era de acuario, a través del exhaustivo ensayo escrito por mí: <Ensayo sobre la nueva era>.

 Según la astrología maya, cada vez que por precesión de los equinoccios la tierra penetra los signos de acuario o leo, la humanidad se enfrenta a un nuevo renacimiento, pasando de la máxima crisis y oscuridad (fin de la noche galáctica) al principio del renacer a una conciencia mucho más inteligente y amorosa, marcando el principio de la construcción de una nueva y profunda realidad, conciencia y por tanto sociedad. En lenguaje científico, diríamos que atravesamos la banda de fotones (gigantescas formaciones tiroidales de radiaciones electromagnéticas altamente energéticas, que emergen desde el núcleo de nuestra galaxia). En consecuencia, el sol bombardea de fotones (de cuerpos de luz, prana y conciencia) nuestro planeta. Aunque más bien, nosotros somos parte del planeta, más que el planeta pertenecernos a nosotros. Nuestra visión egocéntrica nos impide comprender que las galaxias (planetas y estrellas) están vivas e interactúan y comparten información conscientemente.   Saldremos de la banda de fotones que hace que nuestra galaxia y todo lo que habita en ella experimente una enorme evolución, entorno al año 4172/4300, esto es, cuando finalicemos la precesión por el zodiaco de acuario, dirigiéndonos entonces a evolucionar colectivamente bajo el filtro del signo de capricornio.

Nuestra ciencia actual detecta un pulso electromagnético fortísimo desde el centro de la galaxia, los dueños del tiempo, los sacerdotes-astrólogos mayas, llamarían a esto la energía de Hunabku (dios).

En términos de tiempo más útil y cercano, estamos en la última etapa de 13 años:

Del 11 de agosto de 1999 (eclipse total en leo, signo que complementa a acuario) al 21 de marzo del 2013 la humanidad debe madurar considerablemente, responsabilizarse de su intención de amor para con la vida. Afortunadamente las influencias cósmicas nos imbuyen en este proceso de toma de conciencia y de despertar del vehículo cósmico que somos.  El paradigma de sufrir, culpar, no soltar, bloquearse, enfermedad, sentirse desconectados de la vida, … debe ser trascendido, es tiempo de reprogramar la conciencia y los cuerpos, como sin duda las miles de reuniones en todo el planeta de humanos que apuestan por la paz, el entendimiento y la meditación ya están apuntando hacia este cambio que lleva la galaxia (y nuestro ser) esperado ya, miles de años. Estos últimos 13 años, del fin del Gran Ciclo, constituyen el tiempo para tomar conciencia del “salón de los espejos”, esto es la maya o autoengaño hindú, el mecanismo de defensa psicoanalítico llamado proyección. Es decir, estamos en tiempo de comprender claramente que el propio sufrimiento es responsabilidad propia, que nadie salvo nosotros mismos puede disolverlo. Que todo cuando te ataca lo has atraído con tus propias pautas de pensamientos destructivas de autocastigo. No hay circunstancia dolorosa, que no haya creado tu ser/ego, con la esperanza de que aprendas a amarte y dejes de infligirte sufrimiento. Una vez responsabilizados de nuestro sentir, empezaremos a elevar nuestra vibración (aura, campo magnético) y nuestra vida se regirá por emociones constructivas altamente alineadas con todo. ¡Seremos seres intencionales y multidimensionales!, hoy somos aún, comparativamente, animalillos primitivos llenos de dolor, poseídos por enfermedad, culpabilidad, miedo, rencor, tristeza, confusión, …

El afamado final del calendario maya (diciembre 2012), mal popularizado como final del mundo, conlleva no el fin del mundo, sino solo la transformación del espíritu, el despertar de la conciencia y del inmenso poder energético del cuerpo. Esto es llamado en algunas tendencias hindúes y esotéricas, el despertar total de la Kundalini (la iluminación de Shiva) y del cuerpo octaédrico de luz Mercabah (visualice un humano inmerso en un aura de dos pirámides lumínicas unidas por la base). Ya queda un poco menos, para que la humanidad comience a tener verdaderas experiencias sexuales y no ese precario intercambio compulsivo y liberador de tensión al que acostumbra desde sus bloqueos. Esto será el sexo multidimensional, digamos, el camino de los tántricos.

Puede consultar mi ensayo (a la venta en la tienda de Uranium) sobre: <<Tantra, el erotismo energético que libera el poder de la conciencia>>.

Del 21 al 25 de diciembre, se termina un ciclo astronómico de 5125 años (noche galáctica), explicado por los astrólogos/sacerdotes mayas. Hace más de 20.000 años, los astrólogos mayas calcularon ya esta fecha y las consecuencias de estos ciclos cósmicos. La ciencia actual no puede explicar con sus rígidas versiones, un conocimiento tan inmensamente avanzado para aquella época. En esta navidad del 2012, comienza un periodo de 5125 años (¡el día galáctico!), de reintegrarnos a la luz, el amor, la sabiduría y la conciencia. El 21 de diciembre de 2012, nuestro sistema solar completa un giro en espiral alrededor de la estrella Alción, estrella central de las Pléyades. Esto conlleva en consecuencia, lo que en términos esotéricos denominamos renacer a las capacidades multidimensionales del ser. También mencionado en términos de convertirnos en seres galácticos que cruzan el horizonte de sucesos. Dicho de otro modo, nuestras células y hondas cerebrales, se sintonizan en resonancia con la energía de la vía láctea, de nuestra galaxia. Esto explica porque hay tanto humano canalizando (revelación, inspiración) entidades de otros mundos, así como nuevas e ingentes técnicas de sanación energética (Reiki, EFT, Toque para la Salud, Sanergía, Toque cuántico, etc). En términos de chakras, meridianos, nadires, conciencia y bio-energía (prana=ki=chi=kal=Pneuma=Rua=Puah), el ser humano está empezando a convertirse en otra especie que va a trasmutar considerablemente su propio adn (ya que Hanabku, activa el código genético divino a quien vibre a suficiente frecuencia, convirtiéndose en receptor adecuado para la honda del centro de la galaxia). Así despertamos la capacidad para percibir e interactuar con la realidad multidimensional que ya vislumbra la física moderna. Seremos muchísimo más equilibrados, amorosos e inteligentes. La sabiduría humana se va a disparar, el tiempo (la intensidad y comprensión de la conciencia) se está acelerando ya que tenemos demasiado que ordenar interna y externamente. Estamos ante un proceso de siglos, paso a paso, se irá trasmutando esta sociedad enferma, en humanos energética, física y psíquicamente más sanos y capaces de integrarse entre los seres que habitan nuestra galaxia y otras vecinas. Como sabemos, aún debemos aprender a respetarnos a nosotros mismos y a otros modos de vida, tales como animales y plantas.

En realidad se trata del 6º amanecer de la galaxia (el aujero negro de sagitarius A) a la que pertenecemos. Dicho de otro modo, la galaxia en la que existimos y por tanto el sistema solar que constituye el barrio de la especie humana, y por tanto el planeta que constituye nuestro hogar y por tanto nosotros mismos, estamos atravesando un inevitable proceso de enorme despertar espiritual. Y por todo ello, una tremenda crisis a todos los niveles. Tomar consciencia de la propia incoherencia, de la propia brutalidad, egoísmo y destructividad, no puede ser sino una tremenda crisis y sock, antes de estar preparados para cocrear un mundo más armonioso y coherente con la vida y el universo.

Otro de los videos que puede ayudar a comprender que el conocimiento sagrado y esotérico, la astrología, que se le ha ocultado desde hace siglos a la humanidad es Zeigest 1, la entrega relativa a las religiones. En este reportaje se demuestra de una manera contundente como las religiones ocultan de un modo metafórico alusiones claramente astronómicas, es decir, que en verdad señalan la sabiduría espiritual más profunda a comprender, como la astrología. Es decir, los textos sagrados religiosos suelen ocultar el conocimiento más sagrado, aquel que puede hacerte dueño de tu conciencia, la comprensión de cómo cada momento es propicio para determinados movimientos externos o internos. En términos bíblicos, <<el séptimo día dios descanso>> y dejo un universo que evolucionaba siguiendo unas pautas astronómicas de las cuales, ciertos eruditos (astrólogos o ¡”reyes magos siguiendo una estrella”!) pueden deducir los procesos energéticos y psicológicos que acontecen en el ser, así como su reflejo externo: los acontecimientos, esto es, astrología predictiva.

El mismo Carl Jung, sabio que abrió el psicoanálisis de Freud a un paradigma más amplio, que incluye una comprensión más profunda del inconsciente colectivo, de la evolución de la conciencia y de los arquetipos (estados que atraviesa la conciencia en su camino evolutivo), … fue uno de los muchos genios que investigó en profundidad la astrología. En parte el acierto de Jung consiste en estudiar los arquetipos astrológicos y adecuarlos a términos psicológicos y culturales.  Entre muchísimos otros genios amantes de la astrología, encontramos también a Galileo, Copérnico, Newton, Einstein, etc. Tampoco el temario académico oficial de colegios o institutos va a perder tiempo en explicarnos que los grandes astrónomos eran también astrólogos (las pruebas escritas son contundentes). Estos astrónomos aún comprendían la relación entre planetas-estrellas y la materialización de hechos, emociones y pensamientos.

Sin embargo, ¿qué estudioso universitario actual de astronomía aprobaría los exámenes aseverando que cree en la verdad de la astrología como lo hacían los grandes astrónomos de la antigüedad como por ejemplo, el mismísimo padre de la astronomía Ptolomeo? ¿Por qué los dioses de las religiones anteriores al monoteísmo, eran estrellas y planetas? ¿Por qué los sabios griegos deificaban a los planetas y mostraban su temperamento? Los astrólogos tienen la respuesta. El carácter mitológico de por ejemplo Zeus (Júpiter), es en verdad, una alegoría de cómo afecta este planeta a la conciencia humana, conforme a las leyes astrológicas.

¿Qué estudioso universitario de arquitectura, en una asignatura de egiptología, podría afirmar que cree que las pirámides fueron construidas con conocimientos servidos por seres provenientes de otros planetas? ¿Llegaría a licenciarse si se empeñara en demostrar esta hipótesis? La respuesta es no.

¿Aceptaría la cultura china a un erudito que demostrara que la holística y sorprendente medicina china fue enseñada a la humanidad por extraterrestres y no por sabios chinos? Obviamente tampoco.

Los ejemplos de esta índole, son interminables, baste pues, con estas breves ilustraciones. Concluyamos que el intrincado ego (orgullo, vanidad, manipulación) en los poderes que sustentan la cultura humana difícilmente está dispuesto a contemplar versiones tan diferentes a las acomodadas. Sin embargo, la verdadera historia se irá abriendo paso, de la misma manera que finalmente la humanidad tuvo que comprender y aceptar que nuestro planeta no era el centro del sistema, sino la estrella que llamamos Sol.

Para las grandes astrólogos de las culturas maya, egipcia, griega, china, … la astrología constituye la palabra de los dioses. La astronomía, es la mitad de la ciencia, una vez comprendes el orden cósmico, es necesario interpretar como toda sincronía fluye originada en la danza cósmica, esto es astrología. Por esto, los antiguos astrónomos eran también sacerdotes, emisarios de dios. Astrólogos, lectores del destino individual y colectivo.

                                 Escrito por Sirio Simó: astrólogo, Maestro de Reikis (Unitario y Astrológico), terapeuta holístico, maestro nueva era y profesor de yoga, creador y director del Centro de terapias alternativas de Valencia, URANIUM, … texto escrito por éste el 16 de  diciembre 2012.